Rodríguez Sumaza, C.; Prieto Alaíz, Mª de las M.; Prieto Lobato, J. Mª y García-Araque, J. (2020). Heterogeneidad territorial de las políticas públicas de protección social: el caso de las rentas mínimas de inserción en España. Revista de Ciencia Política (Santiago) [online], Vol, 40, nº 3. Epub 04-Dic-2020. ISSN 0718-090X. http://dx.doi.org/10.4067/S0718-090X2020005000121.
Las Comunidades Autónomas han ido desarrollando en las últimas décadas diferentes programas regionales de garantía de rentas que se enmarcan en el contexto de las políticas públicas para combatir la pobreza y la exclusión social y que incluyen unas rentas mínimas de inserción (en adelante, RMI). El desarrollo territorial de este último recurso ha resultado desigual, conformándose así sistemas regionales con diferente grado de generosidad, cobertura, características y alcance. En este trabajo se analizan empíricamente esas diferencias a partir de la aplicación de la técnica de análisis de conglomerados. Los resultados confirman, junto a la relevancia del recurso, la necesidad de reorientar el sistema en aras de la consecución de un modelo territorial equilibrado y garante de la igualdad de derechos y oportunidades de todas las personas.
El análisis realizado de las diferencias regionales en las características y el alcance de las RMI, una de las herramientas más importantes para combatir la pobreza, ha permitido confirmar lo que muchos otros trabajos anteriores apuntaban: persiste en la actualidad en España un panorama diverso y desigual que se explica, en primer lugar, por el diferente esfuerzo realizado por los gobiernos regionales, principales responsables de este recurso, pero también por la ausencia de mecanismos de coordinación y compensación orientados a generar un modelo territorial equilibrado y verdaderamente garante de la igualdad de derechos y oportunidades de todas las personas.
Nuestro trabajo ha prestado atención a algunas de las variables que concretan el esfuerzo presupuestario que hace cada ente regional, a aquellas que caracterizan la naturaleza y extensión que tiene esta prestación en cada territorio, a otras que dimensionan el nivel de adecuación a la población potencialmente destinataria y a las que permiten valorar la intensidad protectora que implica su cuantía de acuerdo a los diferentes umbrales de riesgo de pobreza. Estas variables consideradas de manera aislada permiten observar la enorme heterogeneidad del “mosaico” que constituye la multiplicidad de sistemas de RMI; sin embargo, es el análisis conjunto de estas mediante procedimientos estadísticos (análisis clúster) el que permite dimensionar las disparidades y las confluencias inter e intrarregionales para, desde éstas, configurar cuatro grupos de Comunidades Autónomas.
Uno de ellos (G4), el integrado por Navarra, País Vasco y Asturias, agrupa a las regiones con mejores condiciones en sus RMI, mayor grado de cobertura de la población necesitada y mayor generosidad en los recursos asignados. En la situación contraria se encuentra el grupo (G1) de Comunidades Autónomas integrado por Andalucía, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana y Región de Murcia, con un esfuerzo presupuestario e indicadores de cobertura muy por debajo de la media nacional. Entre uno y otro caso, se sitúan otros dos: las Comunidades Autónomas de Aragón, Canarias, Extremadura, Cataluña y Galicia (G2) presentan mejores resultados que el G1, especialmente en el gasto medio por titular, el gasto regional por beneficiario y el tiempo exigido de existencia de la unidad de convivencia; e Islas Baleares, Cantabria, Castilla y León, Comunidad de Madrid y La Rioja (G3), con valores medios en todas las variables consideradas.